*El requisito de CALIDAD TOTAL, también en nuestro país, se ha presentado de la noche a la mañana, como una exigencia de los mercados globales. Pasó a ser una pauta comercial obligada junto a la evolución de los criterios de calidad que valorizan al hombre como consumidor por excelencia.
*Los criterios de calidad, que hasta hace unas décadas se basaban en un sistema de ciencia, tecnología y gerenciamiento, se trasladan ahora al consumuidor, al que debe informarse a través de diversas fuentes y quien debe decidir sobre sus alimentos.
*CALIDAD es ahora el conjunto de propiedades o características que confieren al producto aptitud para satisfacer necesidades expresas o implícitas. Además de atributos nutricionales, sanitarios, sensoriales, cobran mayor peso aquellos vinculados con la protección del medio ambiente (que hacer con la basura de los envases, el agujero de ozono, etc.) y aquellos de orden ideológico que se manifiestan con sospechas hacia lo que produce la ciencia (en realidad la que hizo posible la calidad de vida actual), Cuestionamientos de este tipo, también nos están llegando a la Argentina, por ejemplo el de los alimentos obtenidos con cultivos de variedades transgénicas; este año con soja y el próximo con maiz, tema que nos debe interesar si deseamos continuar exportando a Europa. Está claro que la tecnología de alimentos debe darle importancia a estas pautas en un marco que hasta hace tres décadas era impensable.
jueves, 13 de agosto de 2009
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